Insolvencia

Representacion del Acreedor

Veamos, a usted se le debe dinero. Entonces, debido a que el deudor se ha declarado insolvente, a usted se le impide hacer nada al respecto, y se enfrenta a la idea de no conseguir nada. Esto es algo difícil de digerir. La pregunta es, ¿qué puede hacer al respecto?

De hecho, sí hay algo que usted pueda hacer al respecto, pero usted necesitará un abogado agresivo que realmente conozca los entresijos del código de insolvencia. De lo contrario, usted se enfrente a no obtener nada.

Las quiebras a menudo fallan, especialmente las reorganizaciones. Como acreedor, que el caso resulte descartado puede que juegue en su favor. O, si usted no puede conseguir que todo el caso sea desestimado, es posible que pueda tener su queja en particular retirada de la quiebra.

Por otro lado, puede que esté en su mejor interés permanecer en la quiebra. Si el deudor tiene capital, lo mejor para usted será luchar junto con los otros acreedores, o llegar a un acuerdo con el deudor. La única manera en la que usted será capaz de determinar la mejor estrategia para sus circunstancias particulares es con la ayuda de un abogado muy bien informado, orientado a los negocios.

Los jueces de bancarrota han oído de todo lo largo de los años, y no tienen paciencia para lloriqueos. A no ser que usted se presenta con argumentos jurídicos cuidadosamente elaboradas, lo único que va a conseguir por las molestias es un enrollo de ojos.

Otro problema son los plazos. Las quiebras son impulsadas ​​por plazos duros. Probablemente no habrá tiempo a la deriva para luego poder contratar un abogado. Una vez que haya perdido una fecha límite importante, será muy difícil, si no imposible, volver al juego.

Lo mejor que puede hacer como acreedor es venirse arriba con una estrategia clara desde el principio y seguirla junto a un abogado de confianza. De lo contrario, resignarse a estar a merced de la ley y de los demás acreedores.